Con la llegada del buen tiempo (aunque quizá en Cambridge sólo esté de paso) vuelven las ganas de salir a pasear para hacer fotos. Sobre todo porque el frío parece que ha desaparecido completamente de las manos. Por lo general suelo salir con un ruta pensada, pero suelo dejarla a un lado y dejar que sean mis pies quiénes finalmente decidan el trayecto. Esta vez me llevó a Downing College. Cualquiera que haya paseado alguna vez por Cambridge sabrá que por el centro de la ciudad se reparten sus 29 colleges, que son como una especie de colegio mayores. Más que el college, que acabé entrando en su recinto por casualidad, lo que más me llamó la atención fueron las vistas desde su interior y uno de sus fabulosos jardines lleno de flores primaverales.
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